Pilotes secantes entubados

La tecnología de pilotes perforados entubados (Cased Auger Piles, CAP) consiste en perforar pilotes por separado por medio de una barrena helicoidal en el interior de una tubería de revestimiento.
La misma técnica también se puede utilizar para perforar pilotes secantes. En este caso, se conoce como tecnología de pilotes secantes entubados (Cased Secant Piles, CSP). La barrena y la tubería se insertan en el terreno mediante dos mesas rotativas que mutuamente rotan en sentido contrario y se desplazan a lo largo del mástil del equipo de perforación.

Esta técnica permite perforar pilotes de un diámetro nominal de 600 mm a 1200 mm.

La profundidad máxima que puede alcanzar la tubería es de 21 m, mientras que la profundidad máxima técnicamente admitida por la barrena es de aproximadamente 30 m (de acuerdo con el diámetro y el equipo de perforación).

Las mesas rotativas se desplazan a lo largo del mástil de manera independiente: en consecuencia, es posible penetrar la barrena y la tubería a diferentes profundidades, de acuerdo con el tipo de suelo. En general, en caso de suelos cohesivos o suelos no cohesivos con contenido de finos, la mecha de barrena y la zapata de la tubería se mantienen al mismo nivel; sin embargo, en caso de materiales no cohesivos gruesos, la barrena penetra más profundo que en la zapata para aligerar el suelo y hacer que sea más fácil moverlo dentro de la tubería. En caso de suelo rocoso, la tubería avanza como un barril de corazonamiento, mientras que la mecha de barrena con dientes aptos para rocas rompe el «núcleo» creado por el revestimiento. Tanto a la mecha de barrena como a la zapata de entubado se les colocan dientes que dependen del tipo de material a perforar.

Tecnología

La secuencia de operación consiste en insertar en el terreno la barrena y la tubería de manera simultánea. Una vez que se alcanza la profundidad máxima de penetración de la tubería, es posible continuar perforando hasta la profundidad del diseño utilizando únicamente la barrena continua. Luego se extrae la barrena y, al mismo tiempo, se bombea hormigón a través del eje hueco central de la barrena para llenar el vacío que dejó el suelo perforado hasta el nivel de trabajo. La tubería generalmente se extrae una vez que la barrena se levanta unos pocos metros adentro de ella. Una vez que la barrena y el revestimiento se retiran por completo, se coloca la armadura de refuerzo a través del hormigón recién bombeado.